Existe el prejuicio de que el adiestramiento canino es algo limitado a unos pocos, como perros grandes y fuertes o perros que se utilizan en un plano profesional, sea de seguridad o de exhibición. Pero esto no es así.
Si bien es cierto que algunas razas tienen mayor facilidad de aprendizaje, lo primero que debes saber es que todo perro puede ser adiestrado. Sí es cierto que lo más recomendable es ponerse en manos de un profesional de la etología —el estudio del comportamiento animal— que no sólo sentará en nuestra mascota las bases de su conducta, sino que nos dará a nosotros los conocimientos para que su educación sea un proceso continuo. Si todavía no te convence, aquí te presento
7 razones por las que el adiestramiento es beneficioso para tu perro:
- Confianza: Educar a un perro no es tarea fácil. Hacer que un animal comprenda qué está bien y qué no es una labor que requiere paciencia y dedicación, pero cuando vayas viendo los progresos de tu compañero ambos sentiréis un mayor vínculo comunicativo. El proceso de educación potencia al máximo la comprensión y la confianza entre el perro y tú.
- Independencia: Reencaminar los malos hábitos del animal hasta hacerlos desaparecer es una garantía de tranquilidad y seguridad doméstica. No sólo para ti y tus familiares y amigos, sino también para la casa en sí. Un perro revoltoso o que no sabe estar solo puede provocar muchos estropicios que se traducen en dinero, imprevistos o incluso problemas de convivencia con los vecinos, si causa mucho escándalo.
- Salud: Un perro sin educar no sólo tendrá trastornos en la conducta, sino que éstos pueden llegar a afectar a su estado físico. El animal puede sufrir las consecuencias de estos desórdenes de forma directa (por ejemplo, una actitud agresiva puede meterlo en peleas con otros perros) o indirecta (la ansiedad y el estrés constantes pueden afectar a su organismo).
- Adaptación: Como en cualquier aprendizaje, cuanto más joven sea el animal, mejor. Sin embargo el adiestramiento permite no sólo educar, sino también reeducar, por lo tanto no hay inconvenientes de edad. En caso de mascotas que viven una segunda oportunidad, como perros procedentes de refugios, la reconducción de su posible mal comportamiento causado por el trauma de abandono es imprescindible para asegurar el bienestar en su nueva vida.
- Adecuación: Normalmente, por adiestramiento se tiende a pensar directamente en agility y actividades más avanzadas, sin embargo hay diversos niveles educativos. A muchos perros, por numerosas causas, incluso la obediencia básica se les resiste. Enseñarles órdenes sencillas facilita que compartas y disfrutes cualquier momento cotidiano junto a tu amigo.
- Positividad: Muchas veces, principalmente por desconocimiento, la primera reacción cuando tu perro hace algo mal es reñirle, con unos gestos y un volumen de voz que lo intimidan y que no solucionan demasiado, ya que el animal no entiendo del todo por qué motivo exacto estás enfadado con él. El adiestramiento emplea el refuerzo positivo para que nuestra mascota comprenda que las cosas bien hechas tienen recompensa, y mantenga un buen comportamiento.
- Fidelidad: Un perro adiestrado sabe comportarse tanto en casa como en el exterior, o incluso en visitas a lugares públicos o privados. En todo momento tendrás un conocimiento casi completo de sus posibles movimientos y reacciones, por lo tanto tanto el animal como tú mismo disfrutaréis con mayor tranquilidad y plenitud de vuestra vida juntos.
Hola tengo un perro salchicha, ladra demasiado a todo el mundo, cuando come ruge y ne rompe todo. No se que hacer.
Hola Romina,
Sentimos leer que tu perrete no se porta bien. Te recomendamos que crees unas normas de comportamiento dentro de casa y, siempre que se porte mal, le corrijas. Cuando haga las cosas bien prémiale con caricias o incluso con su comida favorita. También puede ser un problema de que le falte hacer ejercicio físico…
Te recomendamos que acudas a un adiestrador, te ayudará muchísimo a comprender mejor a tu perro y corregirá sus malos hábitos.
Ya nos contarás cómo ha ido evolucionando su comportamiento.
¡Un saludo!